Cuidados en el embarazo de alto riesgo
El embarazo con riesgo reproductivo obstétrico, también llamado embarazo de alto riesgo, es aquel que tiene mayor probabilidad de enfermedad o muerte antes, durante o después del parto. Es un riesgo que puede afectar, en la misma medida, tanto a la mamá como al bebé y son diversos los motivos que pueden llevar a los involucrados a esta condición.
“Según la Organización Mundial de la Salud, la evaluación de los riesgos no es una medida única que se haga simplemente una sola vez, sino que es un procedimiento continuo durante todo el embarazo y parto”, explica la ginecóloga y doula Mayela Rivera.
Algunos de los factores que pueden identificar un embarazo de alto riesgo va desde cuestiones intrínsecas como el riesgo genético, hasta alteraciones en el contexto social de la persona.
“La asignación de un estado de alto riesgo a la embarazada es importante para identificar los problemas clínicos que pueden presentarse. Debemos partir de que el embarazo es un proceso fisiológico y no una enfermedad y que el nacimiento natural es la vía vaginal.
En ocasiones la paradoja se hace presente, por eso es importante tener una consulta pregestacional. Identificar los factores que influyen en la clasificación como alto riesgo amerita un equipo multidisciplinario de especialistas a cargo de la salud de la embarazada”, explica la ginecóloga.
Durante esta etapa, las mujeres pueden tener señales de alarma que les indique que hay un riesgo para ella y para su bebé.
La especialista Mayela Rivera recomienda ver el “enfoque de riesgos” que puede complicar el embarazo. En este contexto, es importante identificar lo más oportuno posible los factores maternos y fetales que puedan complicar el embarazo.
“Los problemas de sangrado, las infecciones o alteraciones en la presión arterial como la glucosa y las alteraciones en cualquiera de los trimestres del embarazo deben ser vigilados con una comunicación adecuada por el o la ginecóloga”, expone Rivera.
Para la especialista en esta área de la salud, el estado de ánimo puede afectar el embarazo de la mujer, ya que influye en el desarrollo del feto:
“De hecho, las gestantes que sufren problemas de depresión y ansiedad tienen una mayor probabilidad de tener hijos con bajo peso al nacer, los cuales son más susceptibles de desarrollar enfermedades, ya que aumenta el riesgo de padecer parto prematuro o padecer depresión postparto”.
Factores que influyen en un embarazo de alto riesgo
Antecedentes de evaluaciones de riesgo pregestacional
Antecedentes de alteraciones en en el ambiente laboral
La nutrición de la embarazada
Riesgo genético
Tratamiento de infertilidad
Antecedente de inmunizaciones
Presencia de enfermedades infecciosas
Enfermedades crónico degenerativas previas
Hipertensión
Diabetes
Asma
Alteraciones en coagulación
Presencia de embarazos múltiples
¿Qué recomiendan los expertos?
- Ingerir vitamina A como b-carotenos para prevenir la ceguera nocturna y anemia materna.
- Limitar el consumo de bebidas carbonatadas y energéticas, ya que son una fuente dietética de azúcar y suministran pocos nutrientes al cuerpo.
- Se recomienda 20 minutos de ejercicio ligero, como caminar, nadar o deportes de bajo impacto, cinco días a la semana.
- Consumir dos porciones de pescado y mariscos por semana para tener una fuente de omega 3.
- Reducir la ingesta de cafeína.
- Imprescindible asistir con un especialista en el tema para dar un seguimiento adecuado al embarazo.
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